Durante la década de 1.950, en el barrio de San Vicente, se consolidaron varias familias valencianas, quienes se juntaban los fines de semana y días festivos para compartir comidas típicas. Una de esas reuniones dio lugar a la creación del Centro Valenciano «La Barraca». Por 1.980 se disolvió y nuevamente unos descendientes y varias de aquellas personas refundan el Centro Valenciano de Córdoba el 12 de diciembre de 2002.